Ni la lluvia ni el frío fueron obstáculos para los Reyes Magos en la ciudad de Manzanares. Los icónicos personajes de la tradición española se adelantaron noventa minutos a la habitual hora de arranque de la cabalgata del 5 de enero, para repartir ilusión y chucherías entre los más pequeños, y esquivar así las inclemencias del tiempo.
Melchor, Gaspar y Baltasar, acompañados por sus coloridos pajes, desfilaron por las calles de la ciudad en la esperada cabalgata, donde arrojaron puñados de golosinas que llovieron sobre los asistentes. A pesar del adelanto causado por las predicciones de lluvia, los vecinos de Manzanares se agolparon para disfrutar del espectáculo y recibir a sus majestades de Oriente.
Niños y niñas de todas las edades asistieron al evento, con la ilusión brillando en sus ojos, a pesar de las condiciones climáticas. Es esta misma ilusión la que se reflejaba en las caras de Melchor, Gaspar y Baltasar, que año tras año, desafían el frío para cumplir con su tradicional labor de alegrar la víspera del Día de Reyes.
Los rostros emocionados de los más pequeños y el colorido ambiente que reinó durante la cabalgata, evidenciaron que ni la lluvia ni el frío son suficientes para apagar la magia y la ilusión de esta entrañable tradición.
Manzanares se incorpora, de este modo, a la larga lista de ciudades y pueblos de España que, a pesar de las adversidades, mantienen viva la tradición de la llegada de los Reyes Magos, recordándonos a todos que la ilusión y la alegría son dos ingredientes indispensables para recibir un nuevo año.
Fuente: Facebook Ayuntamiento de Manzanares








