El Gobierno de Emiliano García-Page apuesta por la creación del Centro Regional de Folclore en Castilla-La Mancha, con un avance del 65 por ciento en sus obras. La delegada de la Junta Ciudad Real, Blanca Fernández, resaltó este compromiso durante la inauguración de las Jornadas Regionales de Folclore en Manzanares.
El objetivo es que el Centro esté terminado para la primavera de 2024, coincidiendo con el centenario del Ferroviario, reflejando así el compromiso del Gobierno regional con la preservación y fomento de las tradiciones y la cultura popular de la región.
En el marco de las Jornadas Regionales de Folclore, cientos de personas pertenecientes a grupos folclóricos de Castilla-La Mancha y otras provincias se reunieron para promover este importante sector cultural. El evento contó con la presencia de autoridades locales y regionales, así como el presidente de la federación regional de Folclore de Castilla-La Mancha, Raúl Muela.
Blanca Fernández instó a la Federación Regional de Folclore de Castilla-La Mancha a inaugurar el Centro con una amplia variedad de actividades, con el propósito de mantener viva la cultura representada por los grupos folclóricos de la región. Asimismo, destacó la importancia del folclore como un recordatorio de las duras labores realizadas por los antepasados, que encontraban tiempo para celebrar y consolarse a través de la música tradicional.
El Gobierno regional también está trabajando en el reconocimiento de la Jota castellanomanchega como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, en línea con su compromiso con la preservación y promoción del legado cultural de la región.
En cuanto a las obras del Centro Regional de Folclore, se está trabajando en la redistribución de espacios y la instalación de servicios para adaptar el edificio a las necesidades actuales, manteniendo la esencia y la historia del edificio.
En resumen, el Gobierno regional y la Federación de Folclore de Castilla-La Mancha están cooperando para preservar, promover y fomentar la rica herencia folclórica y cultural de la región, asegurando que la identidad y tradiciones de Castilla-La Mancha continúen floreciendo en el siglo XXI.
